fbpx

Si tuviera 15 minutos por semana de una llamada con un dios que todo lo sabe, le preguntaría siempre lo mismo: ¿En qué debería enfocarme y en qué no?
Creo que esa es la pregunta correcta que debemos hacernos continuamente para poder crecer consistentemente. Nos permite centralizar nuestros recursos y nos quita la ansiedad de no estar haciendo algo que quizás sea importante. Saber en que enfocarnos y en que NO, es la diferencia entre dar vueltas en círculos y avanzar de forma consistente.

Trabajando con clientes, me di cuenta que nadie tiene la posibilidad de hacer esa llamada semanal todopoderosa. Con lo cual descubrí una oportunidad de mercado ante esa necesidad. Entonces me dediqué los últimos años a entrenar mis oídos y ojos para detectar esas acciones que, según la etapa de cada persona, pueden traer mejores resultados. Me di cuenta de que había una secuencia, una lógica que no se podía alterar para construir algo sólido.

Para este artículo, lo armé en forma de preguntas para responder una a una. Si la respuesta es claramente un SI, seguí adelante. Cuando la respuesta es muy dudosa o negativa, quizás sea en ese punto donde tu negocio necesite más trabajo antes de seguir avanzando. Aunque no sea perfectamente secuencial, recomiendo avanzar del la primera a la séptima.,

  1. ¿Realmente quiero tener un negocio propio, ser independiente con todo lo que eso implica?
    No hay que dejar afuera esta pregunta porque quizás los motivos de tener un negocio propio no son los correctos. Personalmente considero que es la mejor manera de construir una vida de abundancia conectada con nuestra misión y aportando a los demás. Pero no para todos es igual. Hay muy buenos empleos y muy malos negocios. Para profundizar, dejo un articulo sobre Motivos correctos e incorrectos para tener un negocio propio
  1. ¿Esta mi negocio alineado con mis fortalezas, mi vocación y enfocado a un nicho específico?
    “No se puede competir contra alguien que se divierte trabajando” decía un tweet de Emiliano Chamorro. Estoy convencido de que tener un negocio orientado a temas de especial interés para vos, es una enorme ventaja competitiva, a corto, mediano y largo plazo. En mercados cada vez más competitivos, es condición fundacional que seas un especialista en resolver un problema específico, posicionándote como referencia del tema. Para profundizar Descubrí tu diferencial y apuntá a un nicho para crecer.
  1. ¿Mi propuesta de valor esta probada? ¿Tengo clientes felices y recomendadores?
    No hay marketing ni ventas que te salven de un mal producto o servicio. Para poder multiplicar, tenés que estar seguro de que lo que ofreces es excelente y que eso es percibido por tu cliente. La mejor manera de hacerlo es validando de a poco, obteniendo feedback, mejorando progresivamente y de forma continua. Para profundizar Como ir desde una idea hasta un negocio rentable sin riesgos innecesarios
  1. ¿Estoy comunicando de manera consistente mi propuesta, poniendo mi mensaje ahí afuera, intencionando que me descubran?
    Acá es donde la gran mayoría de profesionales independientes comienza a fallar. Casi todos dependen del boca en boca, lo cual es como salir a pescar y esperar a que salten los pescados al bote. Es condición fundamental para crecer, poner tu mensaje ahí afuera para llegar a personas que te necesitan, pero no te conocen. Para profundizar El buen marketing que multiplica tu negocio
  1. ¿Tengo un mecanismo de venta para llevar a una persona desconocida a ser un cliente feliz?
    Si las respuestas anteriores son afirmativas, ahora es clave entender el proceso de toma de decisión de compra de tu cliente y accionar activamente en eso. Es la diferencia de estar “siempre tirando” y “creciendo consistentemente”. No hace falta ser un experto en todo, pero tener un camino propio y optimizado donde llevás a un desconocido a ser un cliente feliz y recomendador, es clave. Para profundizar La venta inevitable. Como hacer que todo fluya.
  1. ¿Trabajo en mi productividad, teniendo momentos de planificación y un sistema de organización que me permitan ajustar el rumbo y mejorar continuamente?
    Todo lo anterior, por mejor que lo tengamos diseñado, tiene cambios continuamente y hay que adaptarse. Con lo cual, estar optimizando las partes es fundamental para mantener el ritmo de mejora y crecimiento. Esta pregunta junto con la siguiente, muchas veces son transversales a todo el proceso. Porque a veces necesitamos organizarnos y planificar antes de mejorar cualquier otro aspecto. Pero elegí ponerla en este orden, porque considero que es mucho más difícil organizarse cuando no se tiene un motivo claro. Si venimos viendo como lo anterior comienza a dar resultados, la motivación para administrar mejor los tiempos va a ser mayor. Para profundizar Organizado se hace, no se nace.
  1. ¿Tengo una planificación y criterios para definir que aprender, de que manera y de que fuentes?
    Al igual que la pregunta anterior, está orientada a cuestiones transversales a todo el proceso. Pero cuando entendemos hacia donde va nuestro negocio, podemos elegir mucho mejor las fuentes de las cuales vamos a nutrir nuestro saber. Considero que vivimos en una época de oro para aprender. No solo por la cantidad de información (que a veces es un problema por la cantidad) sinó porque hay mucha gente enseñando cosas increíbles de forma gratuita. Una de las mejores formas de aprender, es seguir de cerca a personas que consiguieron lo que vos querés, y ver que recomiendan (libros, podcast, cursos, otras personas). Para profundizar Dejá de aprender sobre “lo tuyo”. Ensanchá tu conocimiento.

Es importante saber que estos procesos de mejora pueden darse en paralelo con una operación normal del negocio. Por ejemplo, si sos psicólogo y estás con la agenda llena de pacientes, seguí haciendo lo mismo, pero reservando un 20 o 30% de tu tiempo de trabajo para ir mejorando tu modelo de negocio. Tener esa habilidad de trabajar en el largo plazo, al mismo tiempo que hacés lo operativo, es la diferencia entre que pasen los años y ver cambios significativos o que pasen los años y estar estancado.