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Vicente de 4 años estaba subiendo más escalones de los que me hacían sentir cómodo. Mi hijo estaba trepado a una escalera que habían dejado los albañiles, con una actitud bastante descuidada para la altura de 3 metros en la que estaba.

No quería bajarlo, porque estaba divertido y consideraba que era un buen aprendizaje para él. Pero le advertí de los peligros: “¡Qué bueno lo que estás haciendo! Pero tené mucho cuidado, agarrate bien y pisa firme en cada paso. Si te caes te va a doler mucho”

Me sentí tranquilo del consejo que le estaba dando: Avanzá, pero conoce los riesgos y hace lo necesario para minimizar el peligro.

Lo mismo quiero hacer hoy con este artículo, contándote los riesgos más comunes al emprender. Si sos emprendedor desde hace tiempo, no van a ser novedad, pero quizás te sirva para recordar que a todos nos pasan (casi) las mismas cosas.

Los 6 riesgos más comunes al emprender:

#1 PODES PERDER PLATA.

Es muy normal, en los emprendedores que comienzan, hacer planes de negocios que no contemplan malas situaciones o imprevistos. ¿Qué pasa si no llegas al punto de equilibrio? perdés plata. No solo que estás poniendo tiempo y energía en tu emprendimiento, sino que también estás perdiendo plata cada día que pasa.

¿Cómo hacemos para evitar esto? hacer muy bien los números desde el principio, si no sabemos, pedir ayuda. Conectate con gente que sepa, con organizaciones especializadas en emprendedores que están empezando, con personas que ya lo lograron. Exponete, anímate a mostrar tus números.

#2 SISTEMA LABORAL E IMPOSITIVO COMPLEJÍSIMO

Me hago cargo de lo que voy a decir: en mi país (Argentina) las leyes impositivas y laborales son extremadamente difíciles de cumplir para una pequeña empresa. Si cumplís con todo tenes dos opciones: 1- perdés competividad 2- te quedas sin rentabilidad. Ambos casos te llevan a situaciones de quiebra. Es una triste realidad.

¿Qué podemos hacer? Informarse con profesionales, leer e investigar sobre el tema, estar actualizados para correr el menor riesgo posible.

#3 NO SIEMPRE TRABAJAS PARA VOS.

Vas a trabajar para vos después de trabajar para los proveedores, los empleados, el alquiler, el estado nacional, el estado provincial, la municipalidad, la empresa que te da electricidad, gas, teléfono, internet, otros servicios, el banco, el prestamista, cargos judiciales, imprevistos, mantenimiento de las instalaciones y equipos, gastos de publicidad, y algunas cosas que me estoy olvidando. Después de pagar todo eso, vas a trabajar para vos. Si hiciste todas las cosas bien, te va a quedar el 10% de todo lo que generaste (En industrias tradicionales).

¿Qué hacemos para maximizar nuestro beneficio? podríamos hablar de infinidad de cosas, pero en resumen, estar enfocados (solo) en las tareas que nos hagan vender más y gastar menos.

#4 NO TENES VACACIONES, NI LICENCIAS, NI FERIADOS, NI FINES DE SEMANA.

Si hay algo difícil de ser emprendedor es poder descansar bien. Es un arte que lleva años dominar y mucho trabajo previo en organización personal y en la estructura de tu empresa.

Tu falta de salud significa perdida de resultados. Es desesperante a veces cuando no podes levantarte de la cama y sabes que tu negocio lo va a sufrir.

¿Cómo podemos lidiar con este problema? Trabajar enfocado y descansar enfocado. Sin distracciones. Aunque puedas tomarte pocos minutos, pocos días, hacé que valgan la pena. Todo lo demás puede esperar.

#5 ES MUY PROBABLE QUE FRACASES.

El 90% de las nuevas empresas, no llegan al quinto año de vida. Las estadísticas son contundentes. Pasan por arriba todo optimismo desinformado que podamos tener.

¿Qué hacemos ante esta adversidad? Muchos emprendedores saltan al vacío sin agarrar una calculadora, sin rodearse de las personas correctas, cometiendo errores evitables. La buena noticia es que la alta tasa de fracasos aplica a emprendimientos, no a emprendedores. Uno como emprendedor puede ir cambiando de empresa, pero mantener sus objetivos claros, más allá de los fracasos circunstanciales.

#6 TODO, AL FIN DE CUENTAS, ES TU RESPONSABILIDAD.

Podes delegar, terciarizar, sistematizar, pero el resultado en última instancia es tuyo. Porque sos vos el que responde frente a tus clientes y tus acreedores. Algunas veces mis días planificados quedan relegados por atender urgencias de errores que comenten personas de mi equipo de trabajo. Porque al fin de cuentas, los resultados buenos o malos son mi responsabilidad.

¿Qué podemos hacer para reducir este tipo de problemas? Concientizar de manera continua a todo el equipo de trabajo de las consecuencias que tiene lo que hacemos y dejamos de hacer.

Quiero dejarlo claro: Las ventajas de emprender son innumerables y no podría imaginar una vida sin tener un negocio propio. Si todavía no emprendiste, te animo con mucho entusiasmo a que lo hagas, pero…

 “Tene mucho cuidado, agarrate bien y pisa firme en cada paso”